Se aproximan nuevos puentes, fines de semana largos y fiestas navideñas, y muchos de nosotros tendremos que coger un AVE o un avión para llegar a destino. Hasta ahí todo correcto pero, antes de estar sentado cómodamente en nuestro asiento, hay que llegar a la estación o aeropuerto y, en muchas ocasiones, especialmente en el invierno, no es tarea fácil.
Empiezan los días más oscuros, con lluvias, nieve o granizo. Un taxi puede suponer un desembolso importante e incluso, a veces, más caro que el propio billete, o se te hace tedioso ir en transporte público por la aglomeración de gente, ir con tus maletas sin poder estirarte plácidamente, llegar hasta la parada o esperar a que llegue el metro o autobús que te deje cerca.
Cuando preparamos un viaje, nos centramos en tener planeado muchas cosas, pero en otras ocasiones, no tenemos en cuenta dónde ni al cuidado de quién dejamos nuestro coche antes de nuestra partida. Antes de viajar, sabemos que debemos tener listos toda la documentación que llevaremos. Elegimos la ropa, compramos lo que nos hace falta. Una vez decidido, llenamos las maletas de ropa, accesorios, zapatos, perfumes, maquillajes o nuestras guías de cosas que ver, listo, ahora sí te puedes ir, pero falta un punto crucial: ¿Cómo llego al aeropuerto sin ir con la hora pegada al cuello? Si no quieres preocuparte, para los días de lluvia, nada mejor que aparcar en la puerta. Y es que con Apark te ofrecemos diferentes servicios con los cuales poder llegar hasta la salida en tu propio automóvil, con la comodidad y ventajas que todo ello supone.
Si vas solo ya es un método bastante práctico, pero yendo en familia o entre más amigos, es la solución ideal. Si analizas todas las opciones disponibles que hay en el mercado (transporte público, taxi convencional, coches compartidos, ride sharing, car sharing,…), podrás comprobar los pros y los contras y evaluar cómo efectivamente Apark y llegar en tu propio coche es tu recurso más conveniente en relación calidad/precio.
Con nosotros, no tendrás que estar buscando parking antes de la hora de salida, con los nervios que ello supone o en aparcamientos lejos de la terminal donde tener que esperar el ómnibus que te lleve hasta facturación o puerta de embarque. Estos autobuses salen cada 15 minutos, de modo que debes bajar el equipaje del coche, luchar con el peso y llevarlo tú mismo hasta la parada del bus, por lo que si llueve te mojarás mucho, será todo un show con la maleta y el paraguas, o es un problema si hace mucho frío o hay niebla al no guiarte bien en la dirección correcta buscando cobijo para no calarte. Una vez en la parada, debes esperar el bus que te llevará hasta la terminal, de modo que es bastante parecido a salir de tu casa y tomar el transporte público.
De sólo leerlo, te has imaginado la situación y no quieres pasar por ello. Si es así, entonces Apark es tu mejor elección. Nuestros precios más que competitivos, se ajustan a los días que estarás fuera, con importantes descuentos cuanto más tiempo estés fuera sin que ello te suponga un ojo de la cara. Con Apark, podrás llevar tu coche justo hasta la terminal del aeropuerto y allí una persona de confianza lo guardará y cuidará hasta su vuelta, para recogerle el día que aterrice y devolverle las llaves de su vehículo en perfecto estado.
Si eres valiente, puedes aparcar gratis en las calles aledañas al aeropuerto o estación. Nosotros no lo recomendamos si vas a dejarlo por mucho tiempo ya que aquí los riesgos son mucho mayores. Tienes de todo, primero lo pueden rayar, ya sea una bicicleta, una motocicleta, un coche que pase muy cerca y hasta cualquier persona que le guste dañar la propiedad ajena. Las inclemencias del tiempo o la incomodidad de tener que buscar otro tipo de medio para llegar desde donde has aparcado al punto de salida de tu avión o tren vuelve a ser otra carga y, sobre todo, esperar a que ningún amigo de lo ajeno te abra el vehículo o te rompan los cristales en búsqueda de alguna pertenencia o que vuelvas y en vez de encontrar tu coche aparcado encuentres que no está y que se lo ha llevado la grúa, por lo que debes ir a recogerlo, perder muchísimo tiempo en trámites o pagar una multa.
Para quitarte todos esos quebraderos de cabeza, nuestros parkings privados y cubiertos le asegurarán que su coche se encuentre como en el garaje de su casa. Nos puedes llamar o escribir un mail y reservas con anticipación, por lo que no tendrás que estar dando vueltas buscando un lugar. Tu espacio ya estará reservado. Dejas el coche a alguno de nuestros chóferes, sí, “los de la corbata roja” y más de 15 años de experiencia, que te estará esperando mucho antes de que llegues y ellos lo llevarán a uno de nuestros aparcamientos subterráneos o cubiertos, según el servicio contratado, con vigilancia 24H, acceso restringido y, si lo solicita, una cámara con GPS que graba tanto el interior como el exterior del vehículo cada vez que se pone en funcionamiento.
Todo nuestro personal posee la acreditación de profesionalidad de chófer y aparcacoches otorgado por AMAC (asociación inscrita y supervisada por el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid), realizan una inspección exterior e interior del vehículo y le darán el CEFV tanto a su recogida como a la entrega. Cuéntenos la experiencia a su vuelta, donde el chofer se lo entregará en la puerta de la terminal (T1, T2 o T4) del aeropuerto o la estación, limpio y con un Pack BRAC de obsequio para usted.
¡Se puede ir tranquilo que nosotros cuidaremos de su coche!
Empiezan los días más oscuros, con lluvias, nieve o granizo. Un taxi puede suponer un desembolso importante e incluso, a veces, más caro que el propio billete, o se te hace tedioso ir en transporte público por la aglomeración de gente, ir con tus maletas sin poder estirarte plácidamente, llegar hasta la parada o esperar a que llegue el metro o autobús que te deje cerca.
Cuando preparamos un viaje, nos centramos en tener planeado muchas cosas, pero en otras ocasiones, no tenemos en cuenta dónde ni al cuidado de quién dejamos nuestro coche antes de nuestra partida. Antes de viajar, sabemos que debemos tener listos toda la documentación que llevaremos. Elegimos la ropa, compramos lo que nos hace falta. Una vez decidido, llenamos las maletas de ropa, accesorios, zapatos, perfumes, maquillajes o nuestras guías de cosas que ver, listo, ahora sí te puedes ir, pero falta un punto crucial: ¿Cómo llego al aeropuerto sin ir con la hora pegada al cuello? Si no quieres preocuparte, para los días de lluvia, nada mejor que aparcar en la puerta. Y es que con Apark te ofrecemos diferentes servicios con los cuales poder llegar hasta la salida en tu propio automóvil, con la comodidad y ventajas que todo ello supone.
Si vas solo ya es un método bastante práctico, pero yendo en familia o entre más amigos, es la solución ideal. Si analizas todas las opciones disponibles que hay en el mercado (transporte público, taxi convencional, coches compartidos, ride sharing, car sharing,…), podrás comprobar los pros y los contras y evaluar cómo efectivamente Apark y llegar en tu propio coche es tu recurso más conveniente en relación calidad/precio.
Con nosotros, no tendrás que estar buscando parking antes de la hora de salida, con los nervios que ello supone o en aparcamientos lejos de la terminal donde tener que esperar el ómnibus que te lleve hasta facturación o puerta de embarque. Estos autobuses salen cada 15 minutos, de modo que debes bajar el equipaje del coche, luchar con el peso y llevarlo tú mismo hasta la parada del bus, por lo que si llueve te mojarás mucho, será todo un show con la maleta y el paraguas, o es un problema si hace mucho frío o hay niebla al no guiarte bien en la dirección correcta buscando cobijo para no calarte. Una vez en la parada, debes esperar el bus que te llevará hasta la terminal, de modo que es bastante parecido a salir de tu casa y tomar el transporte público.
De sólo leerlo, te has imaginado la situación y no quieres pasar por ello. Si es así, entonces Apark es tu mejor elección. Nuestros precios más que competitivos, se ajustan a los días que estarás fuera, con importantes descuentos cuanto más tiempo estés fuera sin que ello te suponga un ojo de la cara. Con Apark, podrás llevar tu coche justo hasta la terminal del aeropuerto y allí una persona de confianza lo guardará y cuidará hasta su vuelta, para recogerle el día que aterrice y devolverle las llaves de su vehículo en perfecto estado.
Si eres valiente, puedes aparcar gratis en las calles aledañas al aeropuerto o estación. Nosotros no lo recomendamos si vas a dejarlo por mucho tiempo ya que aquí los riesgos son mucho mayores. Tienes de todo, primero lo pueden rayar, ya sea una bicicleta, una motocicleta, un coche que pase muy cerca y hasta cualquier persona que le guste dañar la propiedad ajena. Las inclemencias del tiempo o la incomodidad de tener que buscar otro tipo de medio para llegar desde donde has aparcado al punto de salida de tu avión o tren vuelve a ser otra carga y, sobre todo, esperar a que ningún amigo de lo ajeno te abra el vehículo o te rompan los cristales en búsqueda de alguna pertenencia o que vuelvas y en vez de encontrar tu coche aparcado encuentres que no está y que se lo ha llevado la grúa, por lo que debes ir a recogerlo, perder muchísimo tiempo en trámites o pagar una multa.
Para quitarte todos esos quebraderos de cabeza, nuestros parkings privados y cubiertos le asegurarán que su coche se encuentre como en el garaje de su casa. Nos puedes llamar o escribir un mail y reservas con anticipación, por lo que no tendrás que estar dando vueltas buscando un lugar. Tu espacio ya estará reservado. Dejas el coche a alguno de nuestros chóferes, sí, “los de la corbata roja” y más de 15 años de experiencia, que te estará esperando mucho antes de que llegues y ellos lo llevarán a uno de nuestros aparcamientos subterráneos o cubiertos, según el servicio contratado, con vigilancia 24H, acceso restringido y, si lo solicita, una cámara con GPS que graba tanto el interior como el exterior del vehículo cada vez que se pone en funcionamiento.
Todo nuestro personal posee la acreditación de profesionalidad de chófer y aparcacoches otorgado por AMAC (asociación inscrita y supervisada por el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid), realizan una inspección exterior e interior del vehículo y le darán el CEFV tanto a su recogida como a la entrega. Cuéntenos la experiencia a su vuelta, donde el chofer se lo entregará en la puerta de la terminal (T1, T2 o T4) del aeropuerto o la estación, limpio y con un Pack BRAC de obsequio para usted.
¡Se puede ir tranquilo que nosotros cuidaremos de su coche!