Este verano, si no quieres llevarte sorpresas y encontrarte al llegar al parking con el sitio vacío porque los cacos hayan hecho su agosto y te hayan robado el coche, te proponemos una nueva idea que se ha difundido como la espuma como medida para evitar el robo de vehículos.
POR TU SEGURIDAD, ENVUELVE LAS LLAVES DEL COCHE EN PAPEL DE ALUMINIO
Y es que un truco tan fácil y barato, avalado y recomendado por diferentes expertos, como es envolver las llaves en papel de aluminio logrará que dejen de emitir señales, ya que éstas son fácilmente identificadas por las bandas de ladrones, quienes actúan de forma internacional, a veces con herramientas muy sofisticadas, dedicándose a sustraer coches para su reventa en otros países.
Un gesto sencillo como si envolvieses un bocadillo o un sándwich evitará que te lleves un disgusto estas vacaciones y ahorrarte papeleo, denuncias, tiempo y, sobre todo, dinero. La causa es que, aunque el mercado del automóvil haya evolucionado mucho en los últimos años, ahora ya no es necesario poner la llave en el contacto para abrir un vehículo. Basta con apretar el botón del mando inalámbrico, incluso hay vehículos que no hace falta ni eso. Sin embargo, esto que crees que es un punto a favor en el momento de abandonar el concesionario, tiene una serie de inconvenientes.
Las llaves emiten señales y ondas electromagnéticas constantemente que son fácilmente identificadas y se convierten en pistas perfectas por los ladrones. Para ello, únicamente necesitan comprarse otro llavero o captador de estas señales para copiar el código de acceso a un determinado vehículo y así es como si tuvieran un duplicado. Una vez conseguido, el ladrón puede replicar el código de acceso al coche y listo: consigue robar el vehículo sin tener posesión física de la llave.
Los sistemas de apertura a distancia funcionan a dos metros del coche y a una distancia mucho mayor (entre 10 y 15 metros), pero no entre medias. De manera que los ladrones pueden emplear un amplificador de la señal y grabar tu llave aunque esté en el interior de una casa.
Para evitarlo, y aunque parezca una leyenda urbana, diferentes especialistas recomiendan para estos meses veraniegos envolver las llaves en papel de aluminio como método para evitar que el mando emita señales. "Aunque no es ideal, es la forma más económica", ha explicado Holly Hubert, experta del FBI en ciberseguridad.
Otras opciones para que los cacos no clonen tu llave del coche es comprar una bolsa Faraday, que tiene la misma funcionalidad aislante que el papel de aluminio o papel albal y sirve de escudo ante la trasferencia de información, y dos alternativas peculiares aunque eficientes sería guardar las llaves en el congelador junto a los guisantes y tuppers o meterla en el microondas (¡pero no lo pongas en marcha con ella dentro!). De cualquiera de estas maneras, conseguirás 'cortar' la señal que emite constantemente la llave y así los ladrones no podrán piratearla.
Recuerda que para abrir tu coche tendrás que sacar momentáneamente la llave del envoltorio de papel aluminio para accionar el mecanismo.
POR TU SEGURIDAD, ENVUELVE LAS LLAVES DEL COCHE EN PAPEL DE ALUMINIO
Y es que un truco tan fácil y barato, avalado y recomendado por diferentes expertos, como es envolver las llaves en papel de aluminio logrará que dejen de emitir señales, ya que éstas son fácilmente identificadas por las bandas de ladrones, quienes actúan de forma internacional, a veces con herramientas muy sofisticadas, dedicándose a sustraer coches para su reventa en otros países.
Un gesto sencillo como si envolvieses un bocadillo o un sándwich evitará que te lleves un disgusto estas vacaciones y ahorrarte papeleo, denuncias, tiempo y, sobre todo, dinero. La causa es que, aunque el mercado del automóvil haya evolucionado mucho en los últimos años, ahora ya no es necesario poner la llave en el contacto para abrir un vehículo. Basta con apretar el botón del mando inalámbrico, incluso hay vehículos que no hace falta ni eso. Sin embargo, esto que crees que es un punto a favor en el momento de abandonar el concesionario, tiene una serie de inconvenientes.
Las llaves emiten señales y ondas electromagnéticas constantemente que son fácilmente identificadas y se convierten en pistas perfectas por los ladrones. Para ello, únicamente necesitan comprarse otro llavero o captador de estas señales para copiar el código de acceso a un determinado vehículo y así es como si tuvieran un duplicado. Una vez conseguido, el ladrón puede replicar el código de acceso al coche y listo: consigue robar el vehículo sin tener posesión física de la llave.
Los sistemas de apertura a distancia funcionan a dos metros del coche y a una distancia mucho mayor (entre 10 y 15 metros), pero no entre medias. De manera que los ladrones pueden emplear un amplificador de la señal y grabar tu llave aunque esté en el interior de una casa.
Para evitarlo, y aunque parezca una leyenda urbana, diferentes especialistas recomiendan para estos meses veraniegos envolver las llaves en papel de aluminio como método para evitar que el mando emita señales. "Aunque no es ideal, es la forma más económica", ha explicado Holly Hubert, experta del FBI en ciberseguridad.
Otras opciones para que los cacos no clonen tu llave del coche es comprar una bolsa Faraday, que tiene la misma funcionalidad aislante que el papel de aluminio o papel albal y sirve de escudo ante la trasferencia de información, y dos alternativas peculiares aunque eficientes sería guardar las llaves en el congelador junto a los guisantes y tuppers o meterla en el microondas (¡pero no lo pongas en marcha con ella dentro!). De cualquiera de estas maneras, conseguirás 'cortar' la señal que emite constantemente la llave y así los ladrones no podrán piratearla.
Recuerda que para abrir tu coche tendrás que sacar momentáneamente la llave del envoltorio de papel aluminio para accionar el mecanismo.